PAUTES KM 0 A 3 ANYS
La música es una herramienta que inspira, socializa, fortalece los lazos familiares y el desarrollo
cognitivo y motor de los niños. De aquí la importancia de desarrollar, desde temprana edad,
nuestras capacidades musicales.
Nuestra misión es descubrir las aptitudes musicales de cada niño y desarrollar sus habilidades,
formando así, a niños, musicalmente educados y artísticamente sensibles.
En KiddyMusics queremos implicar a los padres como parte importante, tanto
dentro como fuera del aula, para una buena consecución de los objetivos
musicales hacia los niños/as. Por ese motivo los padres deben ser
guiados en su comportamiento, sentirse cómodos y saber que se espera de
ellos. Lo más importante es que disfruten y fomenten el vínculo con sus
hijos.
Objetivos
– Estimular y desarrollar la inteligencia musical de cada niño, respetando su ritmo de
aprendizaje.
– Ofrecer un modelo de educación musical rico y estimulante donde cada niño pueda sacar
significado.
– Enriquecer el entorno familiar y social del niño para que la música forme parte
permanentemente en su entorno más cercano.
– Propiciar un ambiente adecuado para estimular la capacidad musical innata de cada niño y
despertar su curiosidad.
Cómo son las clases
– Actividades adecuadas para cada franja de edad para crear el estímulo necesario para cada niño.
– Padres e hijos disfrutarán de un ambiente distendido donde cantar, recitar, moverse y jugar.
– Ofrecemos un modelo musical basado en el mismo método de aprendizaje que un idioma
cualquiera. Basado en la escucha.
Invitamos a los padres a aprender consejos sobre cómo introducir la música en las actividades
cotidianas familiares.
Cómo comportarse en clase y cómo atender a los niños.
– Los padres son los responsables del bienestar de sus hijos en clase y de que mantengan un
comportamiento respetuoso con los compañeros y el material.
– Es importante que dejemos que el niño experimente solo, sin presionarlo, sin corregirlo i sin
hacerle que mueva los brazos , manos o que haga palmas.
– Forma parte de su comportamiento del niño el querer explorar el entorno del aula. Tratar de no
correr detrás de él, sino estar vigilantes en el caso que entorpezca el ritmo de la clase.
– Si un niño empieza a llorar, chillar o romper de alguna manera el ritmo de la clase, es
importante que el acompañante se mantenga tranquilo y se aleje con el niño en la misma aula
o fuera de ella para intentar que se tranquilice.
– Con la música creamos un espacio no verbal y por lo tanto será recomendable no hablar con los
niños ni con los demás adultos para poder estar atentos a las actividades propuestas. Intentar
mantener el silencio.
– Se ruega “puntualidad” para evitar interrupciones durante la sesión. Vuestros hijos/as lo
agradecerán.
— Para evitar distracciones es preferible no traer comida, bebida ni juguetes.
En una clase de música habrá tantas respuestas y comportamientos como niños haya. No hay
respuestas mejores ni peores, ni correctas o incorrectas. Los niños que tardan más en responder
no significa que no estén aprendiendo. La inmersión melódica, rítmica y de movimiento es igual
para todos, lo que marca la diferencia es el ritmo de respuesta.
Respetar la individualidad y el ritmo de aprendizaje de cada niño es vital para que se sienta con la
suficiente confianza para responder espontáneamente. El miedo a equivocarse es el principal
inhibidor del aprendizaje y la creatividad.
Los padres deben evitar las comparaciones para no crear presión.
En casa es muy recomendable enriquecer el entorno del niño cantando, bailando y favoreciendo
la escucha de música variada y repitiendo las canciones aprendidas en las sesiones musicales de
KiddyMusics.